OSDO nace en el año 1973 para brindar servicios médico asistenciales así como otras prestaciones sociales, a todo el personal de las empresas Duperial y Orbea y vinculadas jurídicamente.

Con el transcurso del tiempo y en función de la evolución de la legislación vigente en la materia, OSDO a partir del año 1993, fue la primera obra social empresaria que diseñó un sistema prestacional basado en las bondades y principios rectores de la legislación específica integrado con las virtudes de gestión y administración de los sectores privados de la salud.

Dicha innovación, conllevó a que fuéramos elegidos por una gran cantidad de afiliados del sistema, encabezando el ranking de adhesiones voluntarias. A pesar de ello, a través del Decreto 1301/97, nuestra Obra Social quedó excluida del proceso de libre elección.

Actualmente, hemos sido reencuadrados por la Autoridad de Aplicación como Obra Social de Dirección (R.N.O.S Nº 4-0270-7) según resolución 1029/03 del 30 de diciembre de 2003 (Boletín Oficial 19/01/04), permitiéndonos, dicha legislación, volver a participar en el proceso de libre elección de Obras Sociales.

Nuestra vocación de servicio y trato personalizado, tanto hacia nuestros afiliados como a sus empleadores, continúa siendo una de nuestras prioridades, lo cual queda demostrado con la participación activa tanto en Asambleas de Afiliados cuanto en el Consejo Consultivo de la Entidad.

En lo referente a la administración de los aportes y contribuciones de ley de nuestros afiliados, es importante recalcar que siempre han sido apropiados en concordancia con los principios rectores de la solidaridad y subsidiaridad que rigen esta materia, dentro del marco legal prescripto por las normativas vigentes.
En este aspecto, nuestra Obra Social está en una situación inmejorable, que podemos avalar con los principales indicadores económicos que la Superintendencia de Servicios de Salud exige para todas las Obras Sociales.

 

A partir del año 2004, OSDO encaro una serie de acciones tendientes a lograr un reposicionamiento institucional que propendiera a que los afiliados al sistema, encontraran en ella una opción realmente diferente a lo que ofrece el mercado.

Hoy podemos afirmar que el sendero trazado comienza a dar sus frutos, sin prisa pero sin pausa, volviendo a colocarnos en una posición de privilegio, por todos reconocida.